martes, 29 de noviembre de 2011

UN GOBIERNO DE COALICIÓN
Si Mariano Rajoy, no habla con todos los representantes políticos de España de otros partidos, y los pone al día con la transparencia documental acreditativa de cuál es la auténtica situación económica de nuestro país, en un año volverá a haber elecciones anticipadas.
España, se encuentra en un momento tan delicado, en el que un resfriado nos lleva a la UCI y de ésta a una depresión o quiebra financiera sin precedentes. La losa de más del 21 % de tasa de paro, y el que se anuncia progresivamente en aumento para los próximos meses ya metidos en 2012, nos convierte en un país tercermundista en esta materia.
Todos los temas de bienestar social, los veremos reducidos, la pócima sagrada tan solo puede existir si todos luchamos y remamos en una misma dirección. Y, a su vez, nos ofrecemos pacíficamente a dichos sacrificios. El pueblo, todos los políticos y banqueros.
Hay que buscar alternancias al actual sistema laboral, con el fin de que los parados giren como norias durante seis meses con mutaciones.
Los políticos, deben ser rasados en salarios y años de trabajo para poseer una jubilación, idéntica a la de cualquier trabajador. No poseer más de un salario ni ocupar más de un cargo retribuido. Y a los sindicatos, no se les pueden subvencionar por parte del Gobierno, éstos deben subsistir de las aportaciones de sus afiliados.
Los eventos en cuánto a fiestas, necesariamente deberán estar exentos de ayudas municipales. Las loterías y el ingenio lograrán su subsistencia.
Otro tema de vital importancia, es eliminar a políticos ya excedidos, y qué no sé por qué siguen de por vida en activo con sueldo, dietas, coche oficial y un largo etcétera. El senado y los senadores deben de acabarse, igualmente con todas las diputaciones en las diecisiete autonomías así como las cortes en éstas.
La demagogia de la enseñanza pública y de la sanidad, solo es crear agujeros sin fondo. Cuando algo está concertado, España sabe lo que le cuesta, lo malo es una sanidad pública imposible de controlar con continuas bajas laborales, al igual que en la enseñanza pública.
Las empresas privadas, no consienten el descontrol por ningún concepto, y el empleado sabe que no es un funcionario. Por otra parte, nosotros los ciudadanos estamos mejor atendidos cuando un centro de salud, pongo por caso, ha pasado a ser concertado.
Igualmente ocurre con la enseñanza pública. ¿Por qué los ciudadanos prefieren y desean que sus hijos estén en centros concertados? Y a su vez, éstos son mucho más económicos para el Estado que los públicos.
España necesita una reforma muy profunda alejada de ideologías caducas. Europa está conformada por una serie de países capitalistas, y España forma parte de ésta hasta que nos echen. Así es, y así será.
José Pardo Ferrer.

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